Todos hemos oído hablar del magnesio, pero pocos saben la importancia que tiene nuestro organismo ¿Sabías que es necesario en más de 300 reacciones químicas y fisiológicas que nuestro organismo ejecuta a diario? Desde el funcionamiento de los músculos, hasta la llegada de nutrientes al cerebro. Para que conozcas más sobre su uso, te detallamos algunos de sus tipos y principales beneficios
Un mineral imprescindible que debes consumir
1. Glicinato de Magnesio
El glicinato de magnesio se absorbe muy bien ya que es una de las formas de magnesio más biodisponibles. Y se recomienda a cualquiera que tenga una deficiencia de magnesio. Además, es probable que cause menos efectos laxantes que otros suplementos de magnesio.
2. Treonato de Magnesio
El treonato de magnesio se absorbe muy bien pues es capaz de penetrar la membrana mitocondrial para mejorar la función cognitiva. Es más, esta forma optimiza los niveles de magnesio en el cerebro, mejorando la memoria
3. Citrato de Magnesio
Cuando el citrato de magnesio se toma en dosis altas puede tener un efecto laxante. Pero es una forma segura para mejorar la digestión y prevenir el estreñimiento. Por esta razón no se recomienda a aquellas personas con diarrea.
4. Malato de Magnesio
El malato es muy buena opción para aquellos que tengan fatiga. Y también es muy útil para desintoxicar. De hecho, el ácido málico en esta forma de magnesio puede cruzar la barrera hematoencefálica y unirse al aluminio
5. Cloruro de Magnesio
El cloruro de magnesio se absorbe especialmente bien. Y es una muy buena opción para la desintoxicar. Además, puede ayudar a mejorar la función renal y estimular un metabolismo lento.6. Óxido de
6.-Magnesio
Esta forma de magnesio se suele utilizar como laxante y para aliviar el reflujo, pero tiene una biodisponibilidad muy baja (solo 4%); por lo mismo, no es recomendable su consumo. Siendo mejor optar por las otras opciones con mayor absorción.
El estrés, consumo de alimentos procesados, y uso excesivo de algunos medicamentos, reducen los niveles de magnesio. Si estás pensando en suplementarte, ten en consideración que sus beneficios son amplios. Contribuye al funcionamiento de tus mitocondrias y de tu metabolismo, a tu salud cardíaca y presión sanguínea, a reducir el riesgo de diabetes de tipo 2 y enfermedades cardiovasculares, entre otros.